Al igual que la luz natural, la iluminación artificial en los hogares u oficinas afecta directamente en el estado de ánimo de las personas, pues tanto su color como su temperatura e intensidad, son algunos de los elementos que el cuerpo procesa para la producción de serotonina. 

Este químico es un neurotransmisor que regula el estado anímico y participa en los mecanismos que rigen la sensación de ansiedad, preocupación, miedo e irritación. Además, sistematiza la temperatura corporal, el apetito, la actividad motora y la secreción de algunas hormonas, como la melatonina.

Por tal razón, el uso de la tecnología LED es la más recomendable para iluminar interiores, ya que se puede adaptar a cualquier entorno, y, además, reduce contaminantes, como el dióxido de carbono (CO2), y ahorra hasta un 80% de luz.

A continuación, algunos de los elementos que se pueden regular con la iluminación interior LED:

1. Temperatura

Mediante la iluminación interior LED se puede conseguir una luz blanca que sea cálida o fría. La primera, es útil para relajarse y descansar, mientras que la segunda, para crear ambientes que estimulen a las personas a realizar sus labores. 

Las ampolletas clásicas con una excelente opción para los hogares, ya que permiten regular la temperatura, y, además, tienen una vida útil de 15.000 hrs. Dependiendo del modelo, pueden alcanzar hasta 60 w de potencia, brindando mayor luminosidad.

2. Intensidad

La intensidad de la luz se relaciona con el aumento o disminución de energía de las personas, por tal razón, regular su brillo resulta fundamental para crear ambientes que inviten al descanso o a la productividad. En Chile existe un reglamento donde se estipula el nivel de luminosidad que debe haber en los ambientes de trabajo, con la finalidad de otorgar condiciones adecuadas para los trabajadores. 

3. Color de la luz

Hay una amplia gama de colores de focos LED y su elección depende del espacio en el que se desee instalar, pues, de acuerdo con la colorimetría, el azul ayuda a despejar la mente, el verde sirve para relajarse, el rojo estimula el cuerpo y el amarillo es útil para la concentración. 

Gracias a la gran variedad de focos LED que existen, como los de colores, las ampolletas y las bombillas clásicas, se puede jugar con algunos elementos clave que permiten al usuario crear espacios más agradables para el descanso, la relajación, la meditación o la convivencia.